Alternativa Socialista Nº 560 (15/12/11)
Estamos a pocos días de un nuevo aniversario de las jornadas que se inmortalizaron con el nombre de Argentinazo. Aunque han pasado 10 años desde aquel momento sigue estando pendiente resolver una de las mayores debilidades que tuvo dicho proceso: la ausencia de una herramienta política con peso suficiente como para transformarse en una alternativa y disputarle el poder a la burguesía y sus organizaciones. Aportar para comenzar a avanzar en esta tarea es el principal objetivo que tiene planteado nuestro partido.
Existe un gran espacio político
El Argentinazo abrió un espacio sin precedentes para construir una alternativa amplia, de izquierda, antiimperialista y anticapitalista con peso de masas y al calor de dicho proceso fortalecer un fuerte partido socialista y revolucionario como el MST. Aunque desde el 2001 hubo distintos momentos, las oportunidades para avanzar en estas tareas siempre estuvieron presentes. El avance del kirchnerismo evidentemente le puso límites al espacio, pero nunca lo cerró. Y la debacle de la oposición burguesa no dejo de alimentarlo. La crisis que se avecina y los ajustes que se verán obligados a realizar desde el gobierno nacional y en las provincias, ampliaran cada vez más el espacio para poner en pie una alternativa completamente nueva como la que estamos proponiendo.
La alternativa que hace falta construir
Desde nuestro partido venimos sosteniendo la necesidad de construir una alternativa antica-pitalista amplia para disputar franjas de masas, alejada del oportunismo y del sectarismo. Que no sea oportunista quiere decir que no concebimos construir una alternativa grande y con millones de votos a partir de apoyar a un gobierno capitalista como el actual o sumarnos a variantes del régimen como la del Frente Amplio Progresista, que no plantea ninguna salida de fondo para los problemas del país. Que no sea sectaria quiere decir que no le vemos ningún futuro a las construcciones de algunos sectores de izquierda que no tienen como objetivo empalmar con corrientes e individuos que provienen de otras tradiciones, como es el caso actual del FIT.
Nosotros proponemos construir una fuerza con un claro programa antiimperialista y anticapitalista que pueda ganar peso de masas a partir de la confluencia con todos aquellos sectores del nacionalismo popular y de la izquierda que estén dispuestos a trabajar ampliamente, respetando las diferencias e identidades de cada componente.
Estamos convencidos que solo una herramienta de este tipo nos puede permitir llegar a la próxima crisis revolucionaria con peso suficiente en el movimiento de masas como para incidir en el curso de la misma y al mismo tiempo permitir que las organizaciones revolucionarias logren dar un salto hacia la influencia de masas para disputar en un próximo periodo el poder.
Nosotros venimos trabajando para construir una alternativa amplia y con propuestas de fondo desde hace bastante tiempo. En función de esto en el último periodo nos sumamos a la construcción del Movimiento Proyecto Sur. Aunque creemos que la herramienta que hace falta construir debe incluir a muchos más sectores, algunos de los cuales están en otros espacios o se mantienen en una posición independiente. Seguiremos dialogando y llamándolos a confluir en un espacio común a los sectores de la CTA que militan actualmente en el FAP. También a los compañeros de las distintas organizaciones de izquierda que conformaron el FIT. Con todos ellos y otros compañeros de la izquierda y el campo popular estamos dispuestos a intercambiar propuestas porque estamos convencidos que solo en un marco de unidad, de amplitud, de firmeza programática y un método democrático que permita resolver las diferencias y convivir respetando la diversidad será posible avanzar y construir una herramienta que pueda romper con la testimonialidad y transformarse en una opción con peso de masas.
Ayúdanos en esta tarea
Para llevar adelante esta política necesitamos de la ayuda de todos aquellos compañeros que coincidan con nuestras propuestas. A todos ellos los invitamos a sumarse a nuestro partido e iniciar una experiencia junto a nosotros. Mientras más seamos los que de manera organizada difundamos la misma propuesta en donde trabajamos, estudiamos o vivimos, más condiciones tendremos de hacerla realidad.