Desde el Hospital Santa Lucía, a donde debió ser llevado por la represión con gas pimienta, el diputado porteño Alejandro Bodart (MST) refutó a María Eugenia Vidal, quien dijo que “la policía se defendió”: “La vicejefa de gobierno no tiene vergüenza para falsear la realidad que mostraron los medios. Todo este desastre es porque Mauricio Macri quiere una oficina más grande. Lo único que defienden él y su policía a palos, balas y gases son los negocios inmobiliarios, a costa de la salud pública y los espacios verdes.”
Desde el Hospital Borda, la ex legisladora del MST Vilma Ripoll señaló: “Es una desmesura brutal. Aquí se reprimió a enfermeras, médicos, pacientes, diputados y periodistas. El Centro Cívico nace manchado de sangre de trabajadores y sobre los escombros de un taller de rehabilitación de salud.”
Sergio García, dirigente de la CTA Capital, quien está yendo a la comisaría donde hay 6 detenidos, agregó: “Los trabajadores estatales nos mantenemos en alerta. El martes habrá un gran paro y movilización, pero no descartamos otras iniciativas de protesta.”
