La Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires expresa su rechazo al Memorándum firmado por la Cancillería argentina sobre la causa AMIA, refrendado irregularmente por el Congreso nacional, dado que no garantiza lograr verdad y justicia. Asimismo, aboga por la apertura de los archivos secretos de la SIDE y la formación de una Comisión Investigadora Independiente como herramientas indispensables para abrir el camino a la verdad y hacer justicia.
Fundamentos
Sra. Presidenta:
A diecinueve años del criminal atentado a la AMIA que costara 85 vidas, sus autores intelectuales y materiales aún siguen gozando de impunidad. El Estado argentino nada ha avanzado, ni siquiera en lo que hace a la llamada “conexión local”.
El gobierno nacional, renegando de sus propias responsabilidades, acaba de hacer convalidar ajustada e irregularmente por el Congreso un Memorándum que no brinda las más elementales garantías para investigar y luego poder juzgar los hechos.
Ante esto, nos hemos pronunciado en forma crítica y hemos acompañado el acto realizado el 27 de febrero ante el Congreso por APEMIA y el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia en contra de la aprobación de dicho Memorándum.
A la vez, respecto de estas cuestiones, en nuestro periódico Alternativa Socialista Nº 588 del 21 de febrero pasado hemos publicado un artículo que reproducimos:
AMIA: ni el kirchnerismo ni la oposición de derecha
quieren que se sepa toda la verdad
Transcurridos más de 19 años del atentado a la mutual judía en Buenos Aires, todavía hoy el hecho permanece sin una resolución a favor de la verdad. En las últimas semanas, el gobierno nacional como parte de una política más global destinada a recolocarse políticamente dio a conocer un acuerdo con el régimen iraní conocido como “Memorándum”. Este consiste en la habilitación para interrogar en territorio de Irán a imputados en la causa por la justicia Argentina. Se han suscitado posiciones encontradas en torno al tema entre el gobierno nacional, la superestructura sionista en Argentina y la oposición de derecha al kirchnerismo. De conjunto todos tienen un anclaje común: no avanzan en el esclarecimiento del atentado. A los únicos que les interesa llegar a la verdad es los familiares que vienen luchando por ello.
La causa AMIA desde el origen ha servido como recurso de distintas estrategias, pero la fundamental fue contribuir a la política internacional del imperialismo yanqui y el sionismo israelí de demonizar a Irán como “nuevo eje del mal” y justificar el boicot y aislamiento de ese país. La causa de fondo es el carácter independiente de Irán respecto del imperialismo en una zona de alta conflictividad geopolítica y de enormes intereses económicos ligados al gas y el petróleo. Por eso, en línea con esa orientación, todos los gobiernos argentinos desde el atentado, incluyendo el actual, abonaron la tesis de la “pista iraní” basada en supuestos e indicios aportados por testigos encubiertos y los servicios de inteligencia yanqui e israelí. Nunca por ejemplo, se investigó el puente local que involucra al aparato de inteligencia del estado. En esto, vale decir, la impunidad del aparato de espionaje estatal, de Menem a Cristina hay un nítido hilo de continuidad. No se trata de tal o cual “conexión”: nosotros queremos que se sepa absolutamente todo lo que ocurrió.
¿Por qué ahora el acuerdo con Irán?
Indudablemente este Memorándum se inscribe en un nuevo momento de la ubicación del imperialismo frente a Irán y una correlación de fuerzas en la región del Golfo Pérsico especialmente compleja para EEUU e Israel. La vitalidad de las revoluciones árabes sumada al empantanamiento yanqui en Irak y Afganistán, alienta a un sector del gobierno de Obama a ensayar un puente de diálogo con el régimen de Teherán. Por eso, el gobierno argentino provocó este viraje hacia Irán no solamente porque actúa en bloque con Brasil, Rusia y Turquía para fortalecer relaciones comerciales con el régimen de Ahmadinejad sino que también tiene el visto bueno de parte de la administración estadounidense para avanzar en ese sentido. Al mismo tiempo, en esta coyuntura electoral particular del 2013 el kirchnerismo evaluó que una iniciativa así presentada como “avance hacia la verdad” tendría un efecto positivo que alinearía a las instituciones judías en Argentina en su apoyo. La realidad es que se volvió a equivocar y aunque contó con un guiño inicial de la AMIA y la DAIA, rápidamente el gobierno reaccionario de Israel actuó presionando a su superestructura local y pasaron una y otra a cuestionar fuertemente al kirchnerismo.
El sionismo y la derecha política argentina, también instrumentos del ocultamiento
El gobierno nacional pretende ganar tiempo con el Memorándum, fortalecer relaciones comerciales con Irán y lograr un golpe de efecto político a favor. No persigue el esclarecimiento del atentado. Por eso, solamente una visión muy inocente podría alentar expectativas en que el régimen iraní acepte el interrogatorio de personajes de su riñón para inculparse. Pura fantasía.
Sin embargo, todo el arco político reaccionario empezando por la UCR y siguiendo con el PRO y demás expresiones de los viejos partidos, se oponen al acuerdo con Irán en unidad a las instituciones judías, pero sin más salida que “la justicia argentina investigue”. Ni una palabra del aparato de la SIDE ni de la impunidad estatal vigente en el atentado que costó más de 80 vidas. En definitiva, son instrumento del sionismo y tienen como única obsesión la especulación electoral que apunta a esmerilar al kirchnerismo. ¿Y la verdad del caso? Bien, gracias. La realidad es que ninguno de los dirigentes quiere llegar a la verdad. Temen que si se esclarece, seguramente se destaparán ollas que pueden involucrar seguramente a muchos de los que hoy se rasgan las vestiduras, pero utilizan a los familiares para el ocultamiento. Sectores críticos a la conducción de las entidades judías, como APEMIA, viene exigiendo una comisión investigadora independiente. Su referente Laura Ginsberg, que denunció el montaje de un “punto final” con el Memorándum K., es una cara visible de esta pelea por llegar a toda la verdad.
Para llegar al esclarecimiento hace falta una comisión investigadora independiente
Desde el MST condenamos desde el primer momento el atentado a la AMIA. Al mismo tiempo, señalamos la hipocresía del sionismo criminal que masacra palestinos en la Franja de Gaza cuando acusa a Irán de estado terrorista y presenta a Israel como “régimen democrático”. Por eso, denunciamos la utilización de la causa AMIA contra Irán al que defendemos contra las agresiones del imperialismo sin por esto prestar apoyo a su gobierno y al islamismo, del que somos profundamente críticos.
Por lo dicho, estamos convencidos que la única manera de llegar a la verdad es creando una Comisión Investigadora Independiente con plenos poderes para investigar a fondo absolutamente todo y a todos los niveles, abrir los archivos secretos de la SIDE y desenmascarar a fondo la complicidad del aparato de espionaje local en el atentado. Desplazar al sionismo de la causa, combatir la utilización politiquera del gobierno y la derecha reaccionaria, son precondiciones necesarias para alcanzar la verdad en el caso de la AMIA. Es el único camino políticamente conducente.
Por todas las razones señaladas, solicitamos la aprobación del presente proyecto.